Si todo va
bien, la siguiente semana vendría otro texto de Murakami, todavía me lo estoy
pensando, ya veré que dice el pueblo; al caso, como podrán ver en el título, en
esta entrada no voy a hacer un “Hablemos de…” o una “Reseña extremadamente
resumida” porque es un cuento corto, uno de los más cortos que he leído de este
señor y la gran diferencia con los otros, a pesar de tener un final más o menos
abierto, podías quedarte tranquilo de que habías entendido la historia y el
final pero en este cuento el final es realmente abierto y me pareció que la
gracia del cuento no es que como lector lo analicemos buscándole el mensaje
sino otra cosa muy diferente. Vamos allá.
Contexto de la obra
“La chica del
cumpleaños” (el título original del relato en japonés es Bāsudei gāru), es
un cuento de Haruki Murakami publicado por primera vez en la antología
coordinada por el autor Birthday Stories (2002) en Japón y para su
versión en inglés, en el periódico The Guardian hasta 2006. En España,
de parte de la editorial Tusquets, que es la versión traducida a la que tuve
acceso, primero fue publicado en la novela recopilatoria de cuentos “Sauce
ciego, mujer dormida” (2006), que de hecho ya había analizado un texto de esta
novela, que fue “Hombre de Hielo” pero ha salido una nueva versión a la que se le han sumado unas preciosas
ilustraciones hechas por la artista visual Kat Menschik.
Tal parece que
es el primer libro ilustrado del autor y que sin duda debe de ser un tesoro
para todos los fanáticos del autor (yo incluida, realmente envidio a las
personas que lo tienen en físico); con respecto a Menschik, de la cual nunca
había escuchado pero que con solo ver sus dibujos en este libro, se nota que
desborda talento, inclusive mientras duerme, parece ser que pronto se volverá
en la consentida de Murakami, pues ella también ya había ilustrado sus novelas “La
biblioteca secreta”, “Asalto a las panaderías” y “Sueño”.
Este texto me
lo leí en una mañana, se lee en menos tiempo de lo que canta un gallo, aunque
es claramente más extenso que el cuento de Augusto Monterroso, “El dinosaurio”, sin embargo,
su estructura y ese final sorpresa que como lector tenemos que completar o
revelar el misterio me hizo recordarlo mucho; y claro, naturalmente, en este
relato se fusiona la rutina diaria con un toque de misticismo, como suele ser
habitual en Murakami. A parte, el autor incluye de forma autónoma una reflexión
titulada "Mi cumpleaños", donde manifiesta cómo normalmente celebra
sus cumpleaños, lo que piensa y siente en estos días, además de lo que
habitualmente realiza, lo cual se me hizo muy tierno y cercano de su parte.
Sinopsis
“La chica del cumpleaños”
es un cuento aconsejable si eres fan de Murakami y, si te gustan los cuentos
con finales sorpresivos al estilo Monterroso; aunque, como siempre, siempre quiero
también sugerirte que leas más cosas de él (muchos de sus trabajos los puedes
encontrar reseñados y explicados en mi blog) y sus novelas más pesadas. Y pues
bueno, ¿de qué va el cuento de hoy?
“La narradora comenta a su interlocutor el curioso episodio que le ocurrió el día de su vigésimo cumpleaños. Trabaja en un restaurante a tiempo parcial y circunstancialmente debe llevar la cena al dueño del restaurante, hombre que vive apartado y solo tiene contacto con el encargado. Con un halo de misterio psicológico, el dueño le invita a pedir un solo deseo que le será concedido. Años después, y siendo el lector un testigo más de la conversación, queda la incertidumbre de cuál fue el deseo y si fue concedido o no.”
Juguemos a descifrar el misterio
Con todo lo
anterior dicho, quise ponerme el reto de dar mi teoría sobre el posible deseo
de la chica, (de nombre desconocido), igual que la persona a quien le relata la
anécdota, (por lo que el detalle de la narración es en segunda persona); ya que
me parece más divertido y pocas personas realmente se ponen a discutir cuál
creen que fue el deseo “verdadero” que el anciano concede. Así que hay que
tomar las pistas que la historia nos cuenta al principio, empezando con la
prota intenta disimular su emoción por su cumpleaños, en el fondo le gustaría
que fuera un día feliz y perfecto, pero dos días antes de su cumpleaños, tuvo
una fuerte discusión con su novio, de esas que parecen ser irreconciliables,
así que ella claramente le gustaría ser feliz en un día que debería ser
especial o que lo pudiera compartir con una persona especial.
Es ahí cuando
ella se refugia en la monotonía de su trabajo para tratar de disimular su
decepción por la situación y así tener una actitud más madura ante la circunstancia
que tiene que afrontar; pero todo cambia cuando la rutina se interrumpe porque
el gerente se enferma y no puede llevarle el café al dueño del restaurante
italiano donde ella trabaja. Un jefe al que ni ella o su compañera mesera han
visto ni oído, es casi como una entidad que aterra por su ausencia, por lo que
cuando ella va a entregar el café y se encuentra con un hombre viejo y afable
se queda sorprendida. Después, cuando el viejo la invita a pasar, comienzan a
platicar y con las palabras sutiles del anciano, ella se da cuenta que la vida
normal que la sociedad le hacía llevar no la hacía feliz y que cualquier joven,
al cumplir esa edad cree saberlo todo, se cree inmune a cualquier daño emocional,
infértil ante cualquier desliz coital e indestructible ante cualquier atentado
físico, pero tener veinte años, a pesar de que ante la ley seas considerado un
adulto a nivel de tiempo, podríamos decir que apenas se ha vivido en realidad y
que cualquier cosa puede suceder.
Posteriormente,
cuando el anciano decide recompensar a la chica por su genuina amabilidad con él
y su disposición a escucharlo, le jura que puede cumplirle un deseo, el que
sea, siempre y cuando no se arrepienta y quiera cambiarlo, luego, hay un
espacio blanco entre ese párrafo al siguiente, donde vemos al anciano
sorprendido por el deseo que ella le pide, pues él esperaba un deseo más banal
y convencional, “lo que una chica normal pediría”, a lo que ella le contesta
que podría pedir ser más bonita, lista o rica, pero que cree que no sabría cómo
aprovechar correctamente esas posesiones. Luego el viejo le dice que su deseo
no es algo inmediato y que deberá esperar mucho para verlo “realizado”; es así
que pasamos a otro espacio entre párrafos y vemos a la chica frente a la
persona a quien le está contando su anécdota, diciéndole que ahora está felizmente
casada con otro hombre, tiene hijos, un coche que le gusta, un perro setter
irlandés que adora y sale a jugar deporte con verdaderas amigas. A partir de
aquí el narrador le pregunta si el deseo se cumplió, y ella dice: “Sí y
también no. Todavía me queda mucha vida por delante, probablemente. No he visto
cómo van a resultar las cosas hasta el final.”
A partir de
aquí unos teorizan que lo que ella pidió fue tener una vida feliz, pero ¿qué es
una vida feliz? Eso depende de cada uno dirás, para algunos la felicidad está
en tener mucho dinero, estar con el amor de tu vida, realizar con éxito el proyecto
de tu vida o poder hacer lo que quieras, pero hay algo para mí que es
importante y es que la razón por la que buscamos tanto la felicidad, no es solo
porque quizás sea lo más cercano a la magia, sino porque la felicidad muchas
veces es confundida con la plenitud; ella en la conversación con el oyente confiesa
que llegó a pensar en desear esas posesiones materiales, (belleza, inteligencia
o riqueza), pero sabe que esas cosas pueden ser efímeras también, porque uno
puede tener una apariencia perfecta pero por dentro ser desfavorecido, en
comparación con tener una vida plena a pesar de vivir con modestia. Y para mí,
la plenitud radica en una felicidad que no dependa de factores externos, en
cambio, es sentirse contento internamente con lo que se posee, sin importar
cuánto tenga o no, pues tiene que ver más que con comprender y saber más de la
vida que creer que uno es feliz con tener, pues hay historias de sobra que
demuestran que el hecho de tener fama, dinero o posición social no garantiza
felicidad eterna.
Otros textos
que he leído proponen que la razón por la que ella no confiesa su deseo y el espectador
no comenta el suyo es por una cuestión de estilo, para alimentar la
imaginación; pero, yo creo que también Murakami lo hizo por esa pequeña
superstición de soplar las velas en un cumpleaños pero no decirlo para así
asegurar que se cumpla pues de lo contrario no se realizará. Es por eso que para
mí se me hace una respuesta incompleta decir que ella deseo, “ser feliz”, es
algo tan general que hasta el genio mágico más experimentado, seguro lo malinterpretaría.
Aunque muchos lectores insisten en decir que ella deseo ser feliz por tener
todas las cosas que todos podrían desear, están dejando por alto la parte de
las decisiones humanas, en la parte que ella dice “somos como somos”, pues
somos el producto de nuestras elecciones, como bien dice el dicho, “lo hecho, hecho
está”.
Sopla las velas y pide un deseo
Porque, por
como yo lo analizo, en realidad, ella procura disfrutar de lo que tiene a pesar
de las abolladuras que pueda tener su coche, los berrinches que hagan sus hijos
o que no pueda ver a su esposo todos los días; la protagonista tantea con
encontrar felicidad en sí misma, a pesar de las “deficiencias” que haya en la
vida; dado que, muchas veces confundimos plenitud con perfección y es algo muy
difícil de superar, y más en la cultura japonesa, donde se trata de encontrar
la vida perfecta, pero la plenitud en realidad significa entender el equilibrio
y eso implica que hay que reconocer la existencia de, tanto de las cosas buenas
como de las cosas malas que nos suceden, para así darles su lugar. En resumidas cuentas, en lo que a mí respecta, su deseo en realidad fue tener plenitud en su vida, pues tenía una vida muy caótica hasta ese momento y cuando llegamos a comprender la vida, tenemos plenitud, no por nada los filósofos buscan tanto el sentido de la vida.
. ₊ ⊹ . ₊˖ . ₊-`♡´-
Pero bueno,
seguro le estoy viendo 3 patas al gato y lo más probable es que me equivoque, así que
a ver qué piensan ustedes.
@SofiaLuCa18
por el bien de todos.
Referencias bibliográficas
- ABC.es. (2008, Febrero 3). La chica del cumpleaños. Diario ABC; ABC.es. https://www.abc.es/cultura/libros/abci-chica-cumpleanos-200802030300-1641609592775_noticia.html
- Mientrasleo. (2018, Junio 5). La chica del cumpleaños. Haruki Murakami. Entremontonesdelibros.blogspot.com; Blogger. https://entremontonesdelibros.blogspot.com/2018/06/la-chica-del-cumpleanos-haruki-murakami.html
- Murakami, H. (2018). La Chica Del Cumpleaños (p. 80). Tusquets Editores S.A. https://lecturia.org/cuentos-y-relatos/haruki-murakami-la-chica-del-cumpleanos/724/ (Trabajo originalmente publicado en 2002).
- Samaniego Baque, D. S. (2013). “La chica del cumpleaños” (“El sauce ciego, Mujer dormida”). In treballmurakami (pp. 1–3). WordPress. https://treballmurakami.wordpress.com/wp-content/uploads/2013/01/darwin.pdf
- Viviendo Mil Vidas. (2018, Abril 29). “La chica del cumpleaños”: Un relato ilustrado de Haruki Murakami. Viviendo Mil Vidas; WordPress. https://viviendomilvidas.wordpress.com/2018/04/29/la-chica-del-cumpleanos-un-relato-ilustrado-de-haruki-murakami/
- Wikipedia, C. (2009, Febrero 27). La chica del cumpleaños. Wikipedia.org; Wikimedia Foundation, Inc. https://es.wikipedia.org/wiki/La_chica_del_cumplea%C3%B1os
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