¡Dios mío, tenía esto perdido entre telarañas en mi USB!
¿Qué tal todo, brujillizos?
Siento no dar señales de vida. Últimamente todo pasa muy rápido. Entre que voy de regreso a mis escuela de magia en unos meses para que por fin me den mi compostelana, llego a casa, como con mi pegaso y mi hijo gatuno,
paso apuntes, paseo y duermo, no existen horas humanas para realizar o
editar muchos de mis escritos y cuentos. Así que aparcando un poco los "deberes", me he dispuesto
por fin a acabar la producción de este trabajito.
Tomando en cuenta la
definición que se da la RAE, el rumor lo definiría con mis propias
palabras de la siguiente manera: “es información que su veracidad es dudosa o
no puede corroborarse del todo.” Sabemos que la naturaleza común del rumor es
que se da de persona a persona, de boca en boca, y si apenas se comenzó a
estudiar el rumor en los medios de comunicación, ha nacido otra vertiente del
rumor que circula por la realidad virtual, ahora llamado “fake news”.
Allaport
y Postman propusieron una fórmula matemática para explicar el rumor:
(Rumor)
= (Importancia del hecho o personaje) x (Ambigüedad del hecho) /Contexto sociocultural
+ Antecedentes
Traduciéndola
con mis palabras: el rumor depende de la importancia del hecho y la relevancia
del personaje principal porque de otro modo no funcionaría, además necesita un
contexto que todos comprenden y “testimonios” pasados que respalden el rumor de
tal modo que no sea necesario corroborarlo.
Concuerdo con la información
presentada que el rumor puede llegar a condicionar el pensamiento o la conducta
de una persona o un grupo considerable de personas, pues al no poder
confirmarlo, el rumor no tardará en expandirse de tal modo que cada uno le
aporta sus palabras y prioriza detalles, así como cambia otros dependiendo de
su percepciones o experiencias con el hecho o protagonista del dichoso rumor.
Tomando en cuenta las 3
perspectivas que existen del rumor: psicológica, sociológica y contextualista;
me gustaría aportar un ejemplo sobre este último: El partido político mexicano
PRI (Partido de Revolución Institucional) le pidió al periódico El Nacional que
publicara una supuesta investigación que se hizo de que el candidato a
presidente del partido opositor Morena, había contratado submarinos rusos y se
estaba aliando con Venezuela y Rusia. Esta historia se distribuyó en la cuenta
de Twitter de dicho periódico y de ahí se divulgo desde esa red, hasta
Facebook, cadenas de WhatsApp y otros periódicos estatales. La historia se
popularizó aún más cuando el candidato de Morena subió un video a su cuenta de
Twitter donde estaba en la costa del mar, diciendo que mostraría los submarinos
y termina refiriéndose a sí mismo de modo burlón como “Andrés Manuelovich”. (La
Actualidad, 2018).
Este rumor estuvo latente
aproximadamente 2 meses por las redes sociales, inclusive se le realizaron
memes al respecto. Este rumor es de aspecto contextualista pues buscó crear
ansiedad en el tema político, tratando de influir en el voto de las personas
tomando en cuenta la postura de izquierda del partido y la situación de crisis
humanitaria de Venezuela, por ende, al usar este discurso junto al hecho de que
la mayoría de los mexicanos no tienen acceso a una educación de calidad o de
alta cultura, se aprovechan de la desinformación, buscando provocar miedo o
malestar en una población.
Lo que podría aportar en éste
tema es que, a pesar de que la naturaleza del rumor no cambie mucho, no se
incluye el comportamiento de éste en las redes sociales, quienes ahora juegan
un rol muy importante, porque es habitual que las personas compartan o reenvíen
rumores sin preocuparse por confirmar su veracidad, además de poder analizarse
como un rumor de boca en boca, el modo de medirlo, desmentirlo o demostrarlo es
más complejo y en muchos casos, suele ser efervescente, en otras palabras, la
fama de un rumor se sustituye por otra y se opta por olvidarlo. Otra aportación
que considero hacer: nadie es la excepción a un rumor, todos hemos estado
involucrados en uno y/o lo hemos originado. Todo es tema de rumor, desde la
moral de nuestro vecino hasta cuando se habla sobre el destino de una nación. Lo
que significa que, cada vez que hay tensión social, florece el rumor.
Un ejemplo claro y especial es la transmisión de radio de Orsen Welles con La Guerra de los Mundos, aunque su intención no era convertirse en rumor, se volvió uno al pasar de boca en boca, agregando detalles y quitando otros, quedando la historia de que los alienígenas conquistaban la tierra. Hubo tráfico por horas, los negocios eran un caos y personas se suicidaron. Algunos consideran este hecho como el primer “fake news”. (Humanities, 2018).
Este caso cumple con las 3
etapas que transforman al rumor que se mencionan en el texto de la materia.
1- Reducción: el rumor se
vuelve más corto, menos detallado y menos complejo.
2- Acentuación: se exageran de
modo selectivo ciertas características del rumor.
3- Asimilación: el rumor es
distorsionado con los prejuicios de la gente.
Con lo que puedo concordar con
el texto es en el espacio de las redes sociales, comparte similitudes con el
chisme/cotilleo o la leyenda urbana: al fin y al cabo, es intercambio de
información, real o no; hay infinidad de razonamientos, pues cada persona tiene
su propio esquema mental de cómo ve las cosas, las escucha e incluso como las
explica. El rumor es como un teléfono descompuesto.
Y claro, porque no, muchas “fake news” surgen
como una “simple broma”, en un intento de satisfacer a un círculo social o
confundir a las personas.
Una “fake news” puede incluso
destruir la reputación de una persona o desacreditar causas, afectando de manera
dañina a diferentes grupos o empresas (muy pocos son los casos de fake news que
termina comprobándose, como el caso de la bocina de Amazon, Alexa, que se decía
que grababa conversaciones para mandarlas al FBI, tal fue el escándalo y el
intento de consumidores por saberlo que Amazon confesó en una conferencia que
las grabaciones sucedían pero solo cuando se detectaban las palabras:
terrorismo, armas, drogas, entre otras del mismo ámbito, pues también confesó
Amazon que tiene una relación abierta con el FBI para advertir compras o ventas
inusuales). Pero casos así son anecdóticos. (Consumerist, 2017).
Volviendo a las “fake news”,
éstas se originan cuando los usuarios de internet aceptan la información que
acaban de recibir, sin someterlo a crítica, pues si encaja en alguna
preferencia, disgusto o la información les parece impactante, tienden a
compartirla. Los prejuicios entre los usuarios, se vuelven el proyectil ideal
para las noticias falsas, lo que provoca que el contenido que se pensó para un
segmento de personas se consiga viralizar. El periodista
Mauricio Jaramillo define las “fake news”
de este modo. “Son noticias falsas, populares en redes sociales e internet, son
contenidos que desinforman a las personas de manera involuntaria (cuando es un error)
o voluntaria (cuando son construidas de manera consciente con motivaciones
específicas para generar alguna reacción).” (González Barco, 2017).
Las “fake news” tienen muchas
formas, pueden ser enlaces de publicidad, artículos de solidaridad o religiosas,
cadenas, regalos de empresas, métodos secretos, etc. Por lo general, suelen
tener títulos más o menos así: “La casa de Jennifer Lawrence te dejará
sorprendida.”, “Esta chica descubrió como ganar un millón de pesos en una
semana.”, “Las películas de Nicolas Cage provocan que las personas se
suiciden.” “La comida de Mc´Donalds está hecha de carne de rata.” Y una
infinidad de títulos más.
Bien se debe saber que muchos
de estos enlaces, suelen usarse para robar datos y venderlos por internet, pero,
así como los chismes y los rumores, las “fake news” fluyen por la red a una
velocidad brutal, volviéndose virales. La transmisión puede desde copiarlo tal
cual y compartirlo de muro a muro, agregando opiniones de gusto libre por todo
el mundo. Rompiendo el esquema tradicional de que el rumor sea lineal. Los
comentarios de cada persona agregan un nuevo cristal para mirar la información
que puede sesgarse de la idea original o la verdadera intención del mensaje,
claro que la información puede ser falsa desde el principio, es ahí cuando uno
debe mostrarse más atento al momento de leer y pensar un poco cuidadosamente la
información antes de compartirla o creerla.
La siguiente cita sustenta mi punto de aportación: “Al contrario del canal tradicional del
rumor, como el juego que mencioné antes, en el que se produce una deformación
por cada sujeto que escucha y se lo cuenta al otro (…) Las redes sociales y el internet en general, son un instrumento
vital para la difusión de noticias; son un espejo público de lo que sucede en
el mundo.” (González Barco, 2017).
Estamos en una época en la que las noticias bien hechas y
sesgadas comparten un mismo espacio donde suelen confundirse por la misma
retórica que usan, las “fake news” suelen obedecer un interés determinado, al
igual que el rumor de boca en boca.
La diferencia radica que, en las noticias falsas se puede
descubrir fácilmente quién las divulgó o puede ser prácticamente arduo de
hacerlo, pero suelen ser más fáciles de demostrar que son falsas a diferencias
de los rumores de boca a boca. Las noticias falsas también suelen usarse para
los chismes, alimentándose de la fascinación, para seguir existiendo.
El impacto de las noticias falsas ha llegado a tal punto
que a finales del año pasado, junto con la noticia del creador de Facebook y su
venta de información, la red social se dio cuenta que la mayoría de las
noticias falsas se distribuían en su página por lo que, duplicó su seguridad
cibernética y cerró muchos grupos y páginas que compartían “Click bites” o
“Anzuelos de clicks”, suspendiendo o bloqueando de manera temporal algunas
cuentas de usuarios que alguna vez usaron o compartieron éste tipo de notas,
para limpiar y mejorar el servicio de la página, con la clara intención de que
éstas no volvieran a aparecer. (Miller
Clark, 2018). Incluso el periódico The Washington Post desveló que: “estos anuncios tienen la finalidad de
exponer temas controvertidos, como la discriminación racial, el control de
armas, etc.” (Gallego Pablo, 2018).
Cabe agregar que estos temas suelen ser publicados en redes
sociales de manera segmentada, en otras palabras, llegan directamente a
aquellos individuos que seguramente creerán en el rumor y lo distribuirán. Por
otro lado, están los usos de “bots” (usuarios o cuentas falsas que sirven para
aparentar el gran impacto de una noticia o distribuirla con mayor fervor). Es
necesario comprender que nuestra sociedad se involucra en gran parte con lo
virtual, y la sociedad que se desenvuelve en lo digital es una sociedad como la
llama Pablo Gallero: poliédrica. Lo
que significa que el individuo recibe una gran cantidad de mensajes diariamente
y está expuesto a mucha información que puede saturarlo, por ende, si la
noticia falsa/rumor, quiere tener efecto en el sujeto, busca ser más conciso, rápido
de leer, apegado a su interés, prejuicio y gustos.
Las noticias falsas es el rumor en una nueva etapa que se
quedará con nosotros por mucho tiempo. Los rumores se usan y manipulan a
propósito a ciertos emisores con más o menos poder para lograr los efectos
sociales o políticos que quieren y aún con el propósito de movilizar a una
población en contra o a favor de algo o alguien.
Delirios aparte, espero que disfrutéis de este trabajo un poquillo. Y
tengo que disculparme a todos aquellos que esperaban cuento para estos inicios de año, en serio, no es que se me hayan
olvidado pero requieren más esfuerzo que este tipo de escritos. Espero que comprendáis lo que digo, aunque a partir de ahora
me pondré más en serio con estos productos literarios más fantásticos y no tan serios...
Y nada más por decir, les deseo suerte
a todo el mundo.
P.D: Para cualquier cosa, @SofiaLuCa18
P.D: Para cualquier cosa, @SofiaLuCa18
Bibliografía:
Artículos:
1. HUMANITIES,
Fall 2018, Volume 39, Number 4. (2018). The Fake News of Orson Welles. 13 de febrero del 2019, de Humanities, the magazine
Sitio web: https://www.neh.gov/article/fake-news-orson-welles-war-worlds-80
3.
Consumerist. (2017). Why Amazon's Alexa Can't Tell You
If It's Connected To The CIA. 13 de febrero del 2019, de CR Consumer Reports
Sitio web: https://www.consumerreports.org/consumerist/why-amazons-alexa-cant-tell-you-if-its-connected-to-the-cia/
4. Gallego, Pablo. (2018). ¿Qué son y cómo funcionan las 'fake
news'? . 13 de febrero del 2019, de El Confidencial Sitio web: https://blogs.elconfidencial.com/espana/agenda-publica/2017-11-24/que-son-como-funcionan-fake-news_1482622/
5.
González Barco, Germán.
(2017). Las claves para no propagar desinformación en redes sociales. 13 de
febrero del 2019, de El País.com.co Sitio web: https://www.elpais.com.co/tecnologia/las-claves-para-no-propagar-desinformacion-en-redes-sociales.html
6. Miller, Clark. (2018). 'Fake news': así funciona la
industria de las noticias falsas con la que algunos jóvenes se ganan la vida en
Europa del Este. 13 de febrero del 2019, de BBC Sitio web: https://www.bbc.com/mundo/noticias-46163407
7. Fernández Poncela, Anna María. (2011). Historia,
características y actualidad de los rumores. 13 de febrero del 2019, de JSTOR
Sitio web: https://www.jstor.org/stable/44646073?seq=1#page_scan_tab_contents
8. StuDocu. (2019). Psicología del rumor. 13 de febrero del
2019, de StuDocu Sitio web: https://www.studocu.com/es/document/universitat-de-barcelona/psicologia-social/apuntes/psicologia-del-rumor/2440535/view
Videos:
1. “El Rumor que mató a un pueblo” (Explicación del cuento de
Gabriel García Márquez, “Algo muy grave va a suceder en éste pueblo”): https://www.youtube.com/watch?v=WNwXM_cCxvU
3. El Rumor (Corto anuncio de Coca-Cola para América del Sur):
https://www.youtube.com/watch?v=QecEiwPhnkI
4. LA ESTRUCTURA DEL CHISME! Alternativa Psicológica TV: https://www.youtube.com/watch?v=EvuTZduW4vw
Muy buena información, excelente
ResponderBorrar¡Muchas gracias por tus comentarios! Me motivan mucho a seguir escribiendo.
Borrar